Compartir
Musicalmente, Buceo Invisible se dio a conocer en 2006 con Música Para Niños Tristes, un primer paso que luego fue afianzándose hasta alcanzar en “Disfraces para el frío”, un tono más maduro, con un estilo propio que no traiciona referencias como los pasajes más apaciguados y sutiles de Radiohead o las extravagancias melódicas de Eduardo Darnauchans, reconocida influencia del grupo.
La búsqueda de experiencias musicales y literarias que den cuenta de ese efecto que producen las mejores composiciones de la banda: el de un halo de luz y color que atraviesa la opacidad de la ciudad de Montevideo
