Buenos Muchachos

Siempre acompañada de pequeños mitos y leyendas, se ganó el status de clásica del rock nacional

A lo largo de una veintena de años de escenarios chicos y grandes, de discos populares y otros de culto, de alianzas naturales y también inesperadas, Buenos Muchachos consolidó un cancionero de rock uruguayo que vive tanto de la intensidad como de las melodías más transparentes y fluidas.

La banda ha editado hasta la fecha siete discos: Nunca fui yo (1996), Aire rico (1999), Dendritas contra el bicho feo (2001), Amanecer búho (2003), Uno con uno y así sucesivamente (2006), Se pule la colmena (2011) y Nidal (2015).

Sus canciones han sido incluidas en las películas 25 Watts (Pablo Stoll / Juan Pablo Rebella, 2001) y La perrera (Manuel Nieto, 2006).

Buenos Muchachos cambió de integración algunas veces, sin dejar de orbitar en torno a dos guitarras de Gustavo Antuña y Marcelo Fernández y la voz de Dalton.

Los primeros pasos del grupo:
«Hijos del aburrimiento y la resaca dominguera, los Buenos Muchachos nacen en 1991 en un garage de Malvín, el refugio al que Gustavo Antuña y Pedro Dalton huían para tocar la guitarra, pintar y charlar mientras el tiempo pasaba narcóticamente lento. Hartos de escapar siempre hacia la nada, invitan a dos amigos a tocar con ellos; aceptan inmediatamente. Los ensayos vuelan y sienten que es hora de salir al mundo, pero éste (como siempre) no se da por enterado así que el ansiado debut será en un cumpleaños, frente a un reducido pero enfervorizado público de novias y amigos. Su presentación oficial sería en Juntacadáveres en marzo de 1992 y en esta ocasión el mundo sí se enteró, por lo menos el de los cien tipos rígidamente hipnotizados por el alud de emoción y ruido que les caía encima desde el inexistente escenario. Los escépticos inmediatamente se convirtieron en fieles devotos mientras los ya creyentes sonreían como si fueran sabios ancianos que recibían a los nuevos acólitos» (Jorge Bonomi, sitio oficial de BUENOS MUCHACHOS)