Hablamos con Martín Buscaglia sobre su presente, discos, libros y vinilos

Previo a su show del 14 de febrero en el patio de la Sala del Museo, hablamos con Martín Buscaglia sobre qué música está escuchando, por qué prefiere el vinilo, qué se viene para este año y qué película y libro disfrutó últimamente.

En este momento, ¿qué discos o artistas estás escuchando?
Después de procurarlo durante años, al fin me hice con el primero de Exuma, un clásico del groove ocultista. Como si Cat Stevens en vez de convertirse al Islam, se hubiera convertido al Vudú. También estoy escuchando unos discos del Brigadier General R. Pirngadie, quien tramó la dominación mundial con sus versiones easy listening del folclore de Indonesia. No conquistó el mundo, pero sí mi corazón.

¿CD, vinilo o plataformas digitales?
Vinilo, desde siempre. Nunca dejé de buscar, comprar, canjear, inclusive cuando se dejaron de fabricar. Entre otras cosas, me gusta el elemento de pesquisa y cacería que conllevan. Ahora estoy en un dogma de constricción, intentando reducir la discoteca a la mitad.

Tu último disco es de 2015, ¿estás trabajando en un nuevo álbum o aprovechás para enfocarte en otras cosas?
En los conciertos con Martín Ibarburu (el próximo es el 14 de febrero en el patio de la Sala del Museo) casi la mitad del repertorio son canciones nuevas, que derivarán en un disco. Y hay cosas en las que estuve enfocado el año pasado que verán la luz en este. Debe estar por salir el disco nuevo de Kiko Veneno, donde laburé en la co-producción. Y está en pausa este año “La casa del Transformador”, el programa que hacía en Radio Gladys Palmera, pero sus más de 40 emisiones están colgadas en la web de la radio.

¿Una película, serie o libro que recomiendes?
Me es imposible recomendar algo a alguien que no conozco, pero comento cosas que disfruté últimamente: La película “Onna no kappa” (o “Underwater Love”), de Shinji Imaoka. Una fantasía porno soft musical japonesa divina. Y el libro “Fermentario” de Carlos Vaz Ferreira.